Por Ana Josefa Silva V.
@ana_josefa
OK. Soy santiaguina de tomo y lomo.
¡Amo SCL!
Me fascina subir en la mañana temprano por cualquier callecita y asombrarme con la extasiante cordillera de Los Andes después de cualquier día de lluvia… O mirar el Manquehue (con o sin sombrero) desde la ventana de mi departamento o contemplar desde mi oficina la puesta de sol, que se luce en un rinconcito cerca del San Cristóbal antes de que lo tapen los cerros…
¿Que tiene partes feas muy feas, invivibles, tristes y sucias?
Sí, claro…
¿Y acaso no las tienen Nueva York, Madrid, Barcelona, Roma y hasta París?
Y todas ellas con un clima ¡muuuucho más duro!
Además de “Biutiful”, en que Javier Bardem se las veía negras en Barcelona, hay una larga tradición en el cine que da cuenta de cuánto se sufre en las ciudades. Piense no más en Chicago y diga ¡mafia! altiro. O Nueva York y ¡pandillas! … O París y ¡buhardillas congeladas!
Es casi reflejo de Pavlov…
Woody Allen, tan dado a los dramas intensos (es verdad, también a las comedias livianas), se ha salido de la norma y, tal como hemos visto desde hace unos pocos años, se ha dedicado al turismo desembozadamente.
Probablemente todo partió con la magnífica “Match Point” (2005), una tragedia shakespereana y operática que está entre lo mejor de su larga filmografía y entre las 100 películas que hay que ver antes de morir.
Drama y todo, el Londres que despliega allí es simplemente alucinante, todo aquello que ha hecho que la capital inglesa esté entre los más apetecidos destinos turísticos de cualquier ser humano (a pesar de su carestía).
Antes de ello, Allen había convertido a Nueva York (y especialmente Manhattan) en algo tan cercano para cualquier aficionado al cine que es como si uno hubiese estado allí desde siempre.
Luego de Londres, el buen Woody descubrió España, a donde partió a filmar la muy turística “Vicky Cristina Barcelona” (2008), con Pé Cruz y Javier Bardem. Hasta le hicieron una estatua en Oviedo (claro que eso fue en 2003)…
Y de allí, ¡a París!, el que ya había visitado para filmar “Todos dicen te quiero” (1996), en una pantalla compartida con NY y Venecia.
En la ciudad luz rodó su exitosa y turística “Medianoche en París” (2011)…
Pasarse a Italia no le costó nada: “A Roma con amor” (2012) repitió la experiencia parisina. Esto es, harta canción oreja, plazas y calles como de folleto turístico, elenco local de relleno y muchos italianos de estereotipo.
Bien.
¿Y si Woody decide asomarse por acá, por el fin del mundo?
¿Y supongamos que NO elige Río ni Buenos Aires sino que un astuto alcalde shileno le ofrece el oro y el morro por rodar en su ciudad? Uno que no los salga correteando, como el edil de Sierra Gorda que en 2008 intentó embestir al mismísimo James Bond-Daniel Craig en el norte (“007: Quantum of solace”)…
Yo, como soy santiaguina, le ofertaría las siguientes locaciones:
- El Parque Bicentenario.
- La Parva (para que no vaya tan lejos).
- El Mercado Central.
- El GAM.
- El Barrio Lastarria.
- El eje Nueva Costanera/Alonso de Córdoba (no nos hagamos los lesos, es ¡re bonito!).
- Parque Forestal/ Museo de BBAA/ Santa Lucía.
- El Manzano y el Morado en el Cajón del Maipo.
- Mirador Mapulemu y todos los parques y jardines del San Cristóbal.
- La terraza Caupolicán en el Santa Lucía.
- La Moneda con su espejo de agua y su Centro Cultural.
- La Chascona en el Barrio Bellavista.
- El Pueblito Los Dominicos con su iglesia.
- Los restoranes al borde de río de El Arrayán.
15. Parque Mahuida en La Reina.
Y se me quedan ¡montón! de lugares en el tintero (o en el mouse)…
Espero sus propuestas de locaciones…
¡Sin limitarse a Santiago!
Proponga las de SU ciudad…
Valparaíso sería la ciudad ideal ya que tiene una atmósfera única e irrepetible en el mundo, aunque como alguien ya escribió anteriormente necesitaría una limpieza extrema para quedar mínimamente decente.
Valparaíso, Estación Mapocho, y el Museo de la Memoria te faltan
Si viniera a Chile, filmaría en Valparaíso, aunque tendríamos que limpiarla bien antes y guardar los perros callejeros. No hay otra locación mejor para una película de Woody Allen.
El Santuario de la Naturaleza, El Arrayan.
Ojala que el decadente, neurotico y simplista de Woody Allen se quede en el estrecho horizonte de la gran manzana, el cine ultimo de Woody Allen es una ideologia de vulgaridad psicoanalitica, el inicio del cine de Woody Allen es extraordinario,hoy es un pesimo cine, superficial y de guia de turismo urbano, el megarelato de Woody es una terapia depreciada , recordemos el inserto casi flamenco en Barcelona, meanoche en paris caricaturas y caricaturas mas caricaturas .
Algo huele mal en el cine de W Allen,
gracias