Por Francisco Javier Bernales
Muy interesante viene la temporada de ópera 2013.
Lo más destacable es que no estarán ausentes los dos más grandes compositores de ópera de todos los tiempos: Verdi y Wagner.
Ambos nacieron en 1813 y ambos cumplen su bicentenario, lo que será celebrado en todo el mundo y Chile no estará ausente.
“Parsifal”, de Wagner, es un gran reto que el Municipal se impuso junto a “El Trovador”, de Verdi… Palabras mayores, toda vez que casi no hay tenores en el mundo que puedan interpretar bien el rol de Manrico y el magnífico tenor coreano Alfred Kim será quien lo interprete.
Otra arista que llama la atención es “Billy Budd”, de Britten. Con este montaje salimos al encuentro del extraordinario compositor británico en el centenario de su nacimiento.
Año de celebraciones por lo visto.
La temporada incluye además “Romeo y Julieta”, de Gounod, maravillosa ópera infaltable y difícil a la vez.
Dentro de los “bread and butter” estará “Elixir de Amor”, de Donizetti, y otra vez “El Barbero de Sevilla”, de gusto universal, e infaltable y entretenida ópera buffa de Rossini.
Y en cuanto a los intérpretes y directores de orquesta, si es que no hay cancelaciones de última hora, tendremos una muy buena temporada.
Llama la atención que veremos producciones en préstamo como el Teatro Reggio di Parma y el Teatro Argentino de la Plata.
A esperar entonces el 2013.