Por Ana Josefa Silva V.
@ana_josefa
¡Bien por El Biógrafo! Aunque sea en un par de funciones diarias (17:40 y 21:45) en Chile podremos ver en pantalla grande “HABEMUS PAPAM”, la genial y singular comedia dramática de Nanni Moretti en torno a un cardenal que es elegido como Sumo Pontífice por sus pares y que, al momento de ser anunciado, entra en crisis de pánico, creando una situación absolutamente inusual y casi inabordable para su entorno.
Puede que uno esté sugestionado. Pero llega a ser inquietante, hasta un poquito sobrecogedor: Nanni Moretti filmó y estrenó “Habemus Papam” el 2011, instalando premonitoriamente una serie de interrogantes y situaciones que tienen mucho que ver con lo que hemos presenciado en estos primeros días de 2013, desde la impensada renuncia de Benedicto XVI hasta la asunción de un Papa, Francisco, que habla de cambios y que viene de Latinoamérica. Es más, si uno se pone “en la más Salfate”, encuentra no pocos detalles y signos “anticipatorios” en este filme: como un par de primerísimos primeros planos sobre una bandera argentina en la Plaza San Pedro mientras se espera la fumata blanca (las imágenes corresponden al 2005); o aquella escena del Papa solitario en el autobús, idéntica a la que vimos del cardenal Bergoglio en el metro, antes de ser investido; o la voz de Mercedes Sosa cantando “Todo cambia”…
Moretti (“La habitación del hijo”, “Palombella rossa”) inicia el filme con las imágenes de las multitudes congregadas en la Plaza San Pedro y los cardenales en procesión enterrando al Papa. Mientras los periodistas se congregan en torno a los hechos, pronto este mismo grupo de purpurados de los cinco continentes se encerrará en la Capilla Sixtina para elegir al sucesor.
La cámara gira hacia el interior (las filmaciones se hicieron en Cinecittà y en el Palazzo Farnese) y desde allí en adelante se detiene ante estos hombres en su cotidiano y su particular rol. Michel Piccoli (que tenía 86 años cuando filmó esta película), como Melville, el Papa elegido, en una actuación magistral, despliega un personaje que en su rostro, sus gestos, su actitud, va revelando con sutileza esa mezcla de emociones, sentimientos y pensamientos que lo inundan: desconcierto, temor, sentido del deber, ¡“sinusitis síquica”!, como dice en algún momento.
Ante este ungido con pánico escénico (“y ahora ¿qué hacemos?”, se preguntan los cardenales como niños perdidos), el vocero decide recurrir a un sicoanalista (el mismo Nanni Moretti), el que se verá en la insólita situación de entrevistarse con su paciente ante los poco más de cien cardenales y, además, con una serie de restricciones doctrinarias.
Moretti, reconocido ateo, elabora una historia que mezcla humor y melancolía desde el comienzo, pero que jamás es sarcástico, ni despectivo, ni menos burlón. En “Habemus…” no hay crítica ni a la Iglesia, ni a los curas, ni al Vaticano. Por eso es que quien vaya tras ello quedará profundamente desilusionado.
Lo que hay es un humor agudo, inteligente, que llega a la carcajada en algunos momentos, pero que sin embargo no es ni siquiera irreverente con sus protagonistas, ese grupo de desconcertados cardenales de edades avanzadas (más algunos funcionarios del Vaticano), puestos en jaque ante la circunstancia de una situación casi imposible.
En rigor, si de alguien se ríe (o se sonríe) esta historia es de los sicoanalistas. Y por cierto de los periodistas.
Lo que en realidad indaga esta película es qué ocurre con este hombre bueno, responsable, hiperadaptado, obediente, que no está preparado para asumir lo que la vida —y Dios— le ha puesto por delante.
La figura del sicoanalista no es gratuita: el encuentro entre estos dos mundos (el de lo religioso y el del hombre racional) es sorprendente para ambos lados y el contraste de conceptos es iluminador.
La película no tiene desperdicio: las diversas situaciones que se suceden, los distintos personajes que entran en escena, van construyendo una historia original y única, en medio de escenarios impresionantes, todo con un humor inesperado pero también pletórico de emotividad.
HABEMUS PAPA
(“Habemus Papam”)
Reparto: Michel Piccoli, Nanni Moretti, Jerzy Stuhr, Margherita Buy.
Dirección: Nanni Moretti.
Guión: Nanni Moretti y otros.
Italia, 2011.
Duración: 1 hora 42.
TODO ESPECTADOR.
[...] 1. “Habemus Papam”. El humor inteligente, culto y original de Nanni Moretti, con la maravillosa Roma como escenario, le haría sonreír y también reír a carcajadas, con esta singular elección de Papa. (En cartelera en El Biógrafo). [...]
No soy católica y ya con tu comentario tan bien hilvanado, me dan ganas genuinas de ir a ver esta película que sin duda es un buen aporte cultural….Gracias !!!