• El Mercurio
  • Las Últimas Noticias
  • La Segunda
  • Soychile
  • Avisos Económicos
  • La Segunda Legales
  • Actualidad
  • Política
  • Economía
  • Espectáculos
  • Deportes
  • Contacto
  • Redacción
  • Debate de ideas
  • Sociedad Anónima
  • Cine, TV y Cultura
  • Deportes
Redacción
  • Inicio
  • Columnistas
    • Alfredo Joignant
    • Cristina Bitar
    • Eugenio Guzmán
    • Gonzalo Müller
    • Guillermo Larraín
    • John Biehl del Río
    • Jorge Edwards
    • Juan Carlos Altamirano
    • Leonidas Montes
    • Luis Eugenio Silva
    • Margarita María Errázuriz
    • Mariana Aylwin
    • Oscar Guillermo Garretón
    • Rafael Aldunate
    • Ricardo Solari
    • Sergio Melnick
  • Editorial
  • Foco político
  • Foco legislativo
  • Archivos
  • Cartas
Inicio» Columnistas » Eugenio Guzmán » La burbuja de Peñailillo

La burbuja de Peñailillo

“La propuesta de reforma electoral ha sido adornada con atributos que no necesariamente tiene”.

Publicado el 07/07/2014

Por Eugenio Guzmán

Una característica común es que las personas tienen expectativas que derivan de los dichos de otros. El problema surge cuando dichas expectativas son burbujas y estallan contra la realidad, dando paso a la frustración. Por eso en política debemos estar alertas y advertir sobre aquellos discursos que evocan sueños que no necesariamente se cumplirán. Es lo que diferencia a un quehacer político basado en la reflexión de uno basado en sensaciones pasajeras.

La actual propuesta de reforma electoral, más allá de la conveniencia de mantener el actual sistema, ha sido adornada con una serie de atributos que no necesariamente tiene. En primer lugar, se le ha dicho a la gente que con el nuevo sistema habrá mayor competitividad, pero la verdad es que no es así, porque en la medida que se permiten los pactos y subpactos, se mantendrá la competencia a nivel de bloque y no de partidos. Es decir, manteniendo el mismo esquema de competencia, ésta no cambiará demasiado.

Segundo, se ha dicho que la representatividad aumentará, dado que se propone que los partidos y pactos puedan postular hasta el doble de candidatos. Si bien esto podría aumentar el número de partidos por pacto, la verdad es que asegurará que los más pequeños y nuevos obtengan representación. Frente a esto, se replica que al ser mayor el número de cargos por distrito, habrá mayores oportunidades para los partidos más pequeños. La verdad es que esto tampoco es así. La razón es que si un partido no es incorporado a un pacto, en el mejor de los casos, en un distrito de ocho escaños (sólo dos distritos tienen ese tamaño) necesitará un 11% de los votos. Pero se trata de un distrito mucho más grande en población y territorio que los actuales, luego, las dificultades serán aun mayores (paradójicamente, se debe señalar que es muy probable que, por efecto de los pactos, candidatos con menos votos salgan elegidos, como sucede en las elecciones municipales).

Tercero, se le ha prometido a la gente que ahora no serán los mismos de siempre los que serán elegidos. Esto no es verdad, pues las posibilidades de reelección están condicionadas por otros factores y ocurren con los más variados sistemas electorales. Si existieran límites a la reelección se evitaría esta situación, aunque esta norma no está exenta de cuestionamientos de fondo.

Por último, se ha dicho que con el nuevo sistema aumentará la participación. Por lo pronto, en el mundo se aprecian disminuciones importantes desde la década del 90 en la participación electoral, lo cual significa que la propuesta no necesariamente resolverá este problema estructural. Si bien existe alguna evidencia que la participación es mayor con sistemas proporcionales, también es cierto que los sistemas con muchos partidos aumentan la abstención, contrarrestando dicho efecto. Incluso se ha cuestionado que este factor se entienda y que realmente sea decisivo.

A pesar de todo, el ministro del Interior sigue insistiendo en esta reforma burbuja. Un proyecto serio debiera haber sido discutido y, sobre todo, pensado con mayor detención.

columna La Segunda, Eugenio Guzmán, Ministro Peñailillo, reforma electoral, sistema binominal

Jorge Edwards

  • El derecho a la historia

    “Chile ostenta una historia densa, compleja, que valdría la pena examinar con seriedad y cuyo examen sería útil”.

Editorial

Una nueva era para Argentina

Parece claro que Daniel Scioli, candidato del oficialismo, se impondrá mañana en la primera vuelta de las el…

Foco Político

Desconfianza y consenso

Esta semana, el SII ha hecho una denuncia para que la Fiscalía Oriente investigue los eventuales delitos trib…

Foco Legislativo

Fragmentación del Congreso

Uno de los posibles efectos de la reforma electoral que más debate ha generado es la eventual fragmentación …

Búsqueda por fecha

julio 2014
L M X J V S D
« jun   ago »
 123456
78910111213
14151617181920
21222324252627
28293031  

Lo más

  • Leído
  • Comentado

      (c) 2012 La Segunda | Blog de Redacción