Reconstrucción del cerro Santa Lucía
Ayer se dio a conocer el resultado de la consulta ciudadana que convocó la alcaldesa de Santiago para discutir el horario de cierre de las botillerías y el posible cambio de nombre del cerro Santa Lucía. Finalmente, por un 54,2% de votos a favor y 45,7% en contra, los ciudadanos de Santiago decidieron mantener el […]
Ayer se dio a conocer el resultado de la consulta ciudadana que convocó la alcaldesa de Santiago para discutir el horario de cierre de las botillerías y el posible cambio de nombre del cerro Santa Lucía. Finalmente, por un 54,2% de votos a favor y 45,7% en contra, los ciudadanos de Santiago decidieron mantener el nombre del cerro. Es positivo que de un modo participativo se ponga fin a una polémica que lleva ya varios períodos alcaldicios.
Llama la atención que el debate público se centrara en el cambio de nombre del cerro y no en el plan de reconstrucción y mantención que urgentemente necesita.
El cerro está muy deteriorado. En 2012 se presentó ante el Consejo Nacional de la Cultura y las Artes un proyecto de reconstrucción que no fue aprobado. Según el diagnóstico que contemplaba, el 80% del pavimento está desgastado estructuralmente por el surgimiento de las raíces de los árboles, lo que ha provocado filtraciones de agua de lluvia y regadío hacia la falda del cerro, afectando directamente al comercio artesanal que hay en la planta baja. La terraza Neptuno, los servicios higiénicos y la ermita también están severamente dañados, y por toda la estructura construida del cerro se pueden apreciar grietas y desprendimiento de estuco y pintura.
La municipalidad ya dio luz verde a un plan para revertir el deterioro del cerro. La secretaria de Planificación Comunal, Gabriela Elgueta, aseguró que cuando Carolina Tohá llegó, en 2012, ya se habían encontrado con el cerro severamente deteriorado producto del terremoto, y sostiene que hoy un presupuesto de $50 millones ya está aprobado para la reconstrucción de la terraza Neptuno, que esperan comience dentro de las próximas semanas.
El experto Jaime Migone, académico de la Escuela de Arquitectura de la U. Central, sostuvo la importancia de un plan de restauración. Sin embargo, recalcó que debido al impacto del deterioro se requiere de una detenida evaluación del estado de conservación del cerro, que pueda precisar los daños de forma integral y completa. No es un proceso rápido que sólo contemple el estuco y las terminaciones de la terraza.
El plan de reconstrucción del cerro es, a todas luces, una mirada en la dirección correcta. Ahora que las vicisitudes de su nombre están resueltas y hay un plan de reconstrucción con fondos aprobados, es preciso mantener el foco en el cerro y su restauración, para que ésta se desarrolle prontamente. No hay que olvidar que la imagen y el patrimonio de Santiago están en juego. No por nada, 19 mil turistas extranjeros visitan el cerro mensualmente.