Acuerdos en China
“Es fundamental respaldar el libre comercio sin exclusiones por motivos políticos”.
Las reuniones internacionales sirven para que los líderes se conozcan personalmente, aunque muchas resultan ser ejercicios innecesarios que logran pocos avances sustantivos. Ocasionalmente, los encuentros coinciden con los deseos de sus participantes de marcar un giro en sus políticas internacionales, como ocurrió esta semana en la cumbre de los 21 miembros del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC) en Beijing.
Para Bachelet, el evento ofreció una oportunidad para acercar nuestro país a China. Mostró cautela al evitar críticas directas a la situación de los derechos humanos de los chinos, como lo solicitaba un proyecto de acuerdo de la Cámara de Diputados impulsado por la DC. Aunque el Partido Comunista chino no respeta garantías básicas de su pueblo, especialistas del tema celebraron la actuación de la Presidenta. Introducir el tema de los DD.HH. en Hong Kong habría ofendido a los anfitriones, podría afectar sus inversiones en nuestro país y no habría logrado avanzar las libertades individuales en China.
La Presidenta también ocupó el encuentro para acercar a nuestro país a la posición de China en intercambio comercial. Si bien ya contamos con tratados de libre comercio con China y EE.UU., manifestó su apoyo al Área de Libre Comercio del Asia Pacífico (FTAAP) impulsada por China, sin desechar nuestra participación en el Acuerdo Transpacífico de Asociación Económica (TPP) que promueve EE.UU. sin incluir a China. Es fundamental respaldar el libre comercio sin exclusiones por motivos políticos. De hecho, EE.UU. y China firmaron un acuerdo para eliminar aranceles para una amplia gama de productos tecnológicos, lo que puede estimular un tratado con otras naciones a través de la Organización Mundial del Comercio.
En su reunión bilateral, los presidentes Obama y Xi Jinping firmaron un acuerdo para reducir sus emisiones de gases que calientan la atmósfera. Existen motivos de escepticismo en ambos países: es posible que las reducciones prometidas por China ya estaban en carpeta por motivos de protestas internas contra la contaminación del aire de sus ciudades, y el Partido Republicano hará lo que pueda para bloquear la implementación de las promesas de Obama.
Sin embargo, éste es muy probablemente el acuerdo más importante jamás firmado para enfrentar el cambio climático. Por primera vez, los dos principales emisores de gases se comprometieron a reducciones sustanciales, con fechas y cifras específicas, que serán un ejemplo para las demás naciones del mundo. Cuando menos, los foros internacionales tienen la utilidad práctica de acelerar la negociación y firma de este tipo de compromiso.