Violencia
Señor Director: Esta semana fuimos testigos de un hecho impensado, violento y completamente repudiable, cuando la sede de la Brigada de Homicidios Metropolitana de la PDI fue atacada deliberadamente por un grupo organizado, lo que dejó como resultado un total de tres miembros de dicha institución con heridas leves y daños materiales, además de la […]
Señor Director:
Esta semana fuimos testigos de un hecho impensado, violento y completamente repudiable, cuando la sede de la Brigada de Homicidios Metropolitana de la PDI fue atacada deliberadamente por un grupo organizado, lo que dejó como resultado un total de tres miembros de dicha institución con heridas leves y daños materiales, además de la conmoción de todo el país, al ver cómo se agredía cobardemente y en forma planificada a personas que sólo trabajan para el beneficio de Chile.
Como sociedad, no podemos permitir que estos hechos se repitan y tampoco podemos quedar impasibles ante las opiniones vertidas por algunas personas que criticaron a los funcionarios allí atacados, por defender sus vidas y la propiedad fiscal. Esas críticas, livianas y antojadizas, consiguieron girar el eje de los acontecimientos y convertir —al menos en algunos medios— a las víctimas en victimarios.
Eso es inaceptable y todos quienes conformamos el país debiéramos estar de acuerdo en que si se ataca a una institución permanente de la República, como es la PDI, se está atacando a toda la comunidad, en definitiva.
Prefecto Inspector (r) Juan Villarreal
Presidente del Círculo de Oficiales Generales en Retiro de la PDI