Tortura

Señor Director:

El demoledor documento sobre las acciones de la Agencia Central de Inteligencia, la casi omnipresente CIA, asegura que las variadas formas de tortura utilizadas no han tenido apenas efectividad a la hora de obtener información. Así lo ha reconocido el propio Presidente Obama, al que se le han ocultado sistemáticamente los manejos de sus espías. Las revelaciones del informe, fruto de cinco años de investigación del Senado, han puesto de manifiesto, sin embargo, uno de los aspectos que más han contribuido a consolidar la democracia norteamericana: la voluntad de transparencia que garantiza, en última instancia, el conocimiento de la verdad como fundamento del Estado de Derecho.

Es posible que los métodos de la CIA cambien a partir de ahora, pero es evidente que nada puede justificar la tortura.

Jesús Domingo Martínez