Diplomacia pública
“Hemos llevado adelante una estrategia internacional parcial”.
Mucho se ha debatido en Chile acerca de cuál es el mejor camino para enfrentar las controversias internacionales, especialmente con nuestros vecinos de Perú y Bolivia.
Luego del fallo en la Corte de La Haya por el diferendo con Perú, surgieron diversas voces de analistas y diplomáticos que llamaron a replantearse la estrategia que se debió haber seguido y alertaron acerca de las falencias que exhibió ésta, a la luz de los resultados obtenidos.
Acto seguido se dejó caer Bolivia, siguiendo el mismo expediente de llevar nuestras diferencias marítimas a la referida Corte Internacional de Justicia. Esta vez, no pudimos alegar sorpresa, ya que el Presidente Evo Morales fue siempre muy claro a este respecto.
Nuestro país no puede continuar intentando tapar el sol con un dedo. Sus relaciones vecinales llevan demasiado tiempo generando inestabilidad en la política exterior y, de seguir así, cosecharemos otra derrota en una materia en la que la opinión pública nacional siempre ha creído que nos asiste la razón.
Hemos llevado adelante una estrategia internacional parcial, que sólo se hace cargo de las dimensiones jurídicas y legales de los problemas. Nuestra Cancillería, por años, ha volcado sus esfuerzos en demostrar el apego al derecho de nuestras posiciones, desconociendo los efectos de las comunicaciones en el escenario internacional.
La capacidad de comunicar es vital para gobiernos, diplomáticos, políticos, ciudadanos e instituciones que pueden influir de manera decisiva en una creciente opinión pública globalizada.
Debemos entenderlo y aplicarlo pronto. Los conceptos de diplomacia pública y de poder blando, entendido éste como aquel que emana de la capacidad de los actores de hacerse valer por los valores y la cultura que promueven, resultan fundamentales si queremos de verdad ser exitosos en la defensa de nuestros legítimos intereses. Bolivia ya lo ha entendido y nos lleva una ventaja en este camino.
Bien haría nuestro Ministerio de RR.EE. en crear una unidad de alto nivel que se ocupara de estos aspectos. Sin importar si tenemos por delante o no algún diferendo que enfrentar.