Intendente
Señor Director: El proyecto del Ejecutivo para la elección popular de intendente es una propuesta flaca, que presenta una autoridad desnutrida de facultades, y para peor, le pone al lado un gobernador regional que no es otra cosa que un segundo intendente, directamente dependiente del órgano central, con todas las facultades que le traspasa el […]
Señor Director:
El proyecto del Ejecutivo para la elección popular de intendente es una propuesta flaca, que presenta una autoridad desnutrida de facultades, y para peor, le pone al lado un gobernador regional que no es otra cosa que un segundo intendente, directamente dependiente del órgano central, con todas las facultades que le traspasa el Ejecutivo.
Se esperaba la elección de un intendente que estuviera empoderado, al menos, con las mismas facultades que actualmente le confiere la ley a ese cargo. En su lugar, se debilita la institución y se lo homologa y confunde en atribuciones con el presidente del Consejo Regional, creando otra autoridad paralela con más atribuciones.
Es decir, el Ejecutivo en vez de fortalecer la representación local, lo que hace es dividirla en tres figuras que se topan entre sí, terminando finalmente por debilitarla.
Así las cosas, la propuesta en cuestión no pasa de ser una tomadura de pelo que nos deja en peores condiciones. Da cuenta de que el actual Gobierno aún no ha entendido el mensaje que con fuerza vocifera el mundo regionalista: una descentralización real, que pasa por mayor autonomía financiera y el traspaso efectivo de atribuciones a los gobiernos regionales. En ese contexto, el proyecto en cuestión deja mucho que desear.
Bernardo Berger Fett
Diputado