Segunda mirada: ¿Activo o pasivo?
Por definición, el activo es el sujeto que mueve la acción. Es quien propone, impone y domina. El pasivo, en cambio, sólo recibe, sometiéndose al activo. Esta relación activo-pasivo es extrapolable a muchas situaciones. En lo que respecta al lobby, la ley determina a lobbistas y financistas como sujetos activos y a funcionarios públicos como […]
Por definición, el activo es el sujeto que mueve la acción. Es quien propone, impone y domina. El pasivo, en cambio, sólo recibe, sometiéndose al activo.
Esta relación activo-pasivo es extrapolable a muchas situaciones. En lo que respecta al lobby, la ley determina a lobbistas y financistas como sujetos activos y a funcionarios públicos como pasivos.
Pero, ¿qué ocurre cuando los pasivos buscan ser seducidos por los activos? Ministros, senadores y diputados dejan de ser los cortejados y cortejan ellos mismos a empresarios en busca de regalos.
Cuando Felipe Kast le pide a Délano “un apoyo, por más modesto que sea”, ¿es el activo o el pasivo de la relación? ¿Es pasivo Carlos Délano cuando Moreira le pide gasolina para los 1.000 metros finales de su campaña? Cuando Ena von Baer pide financiamiento está ella misma tomando las riendas de la situación; y cuando se reúne el trío Dávalos-Luksic-Compagnon, en ese interés hay claramente un cambio de roles. Así, los funcionarios públicos se transforman en los pasivos-activos del lobby.
E. Rispatrón