Elecciones Israel
Señor Director: El artículo de Joyce Ventura publicado el jueves 19 (P. 24), en que comenta las recientes elecciones en Israel, atribuye el éxito de Netanyahu al “cansancio de la población frente al hostigamiento de Hamas”, “atenazados por el miedo de no alcanzar los 15 segundos para llegar a los búnkeres”. El resultado obedecería al […]
Señor Director:
El artículo de Joyce Ventura publicado el jueves 19 (P. 24), en que comenta las recientes elecciones en Israel, atribuye el éxito de Netanyahu al “cansancio de la población frente al hostigamiento de Hamas”, “atenazados por el miedo de no alcanzar los 15 segundos para llegar a los búnkeres”. El resultado obedecería al instinto de sobrevivencia frente a las acciones de un grupo “terrorista”, en lo que denomina “Guerra de Gaza”. El artículo nos merece los siguientes comentarios:
Calificar de “guerra” a una acción militar contra una población civil desarmada por parte del cuarto ejército más poderoso del mundo, con más de 2.100 muertos, 11.000 heridos y 17.000 viviendas destruidas, no se ajusta a la realidad. Actos de ese tipo siempre han sido calificados como masacre o genocidio y sus autores, como criminales.
Calificar como “terrorista” a Hamas, cuando más del 90% de quienes cayeron bajo su fuego fueron soldados israelíes que ocupan Palestina, ofende gravemente a todos los patriotas que han luchado en forma de guerrillas contra las fuerzas de ocupación de sus países, incluidos quienes resistieron al nazismo.
Es válida su preocupación por la seguridad de la población israelí; sin embargo, no se hace cargo de que familias palestinas completas no contaron con ningún lugar y ni siquiera un segundo para evitar la muerte. Entre ellos, más de 500 niños.
Las declaraciones de Netanyahu respecto de que no habrá un Estado palestino son elocuentes. Lo que Israel pretende es continuar una ocupación militar ilegítima, con el muro de separación y los asentamientos, al margen del orden jurídico internacional y, aun así, gozar del derecho a vivir en paz. No puede, por tanto, culpar a la “asimetría moral” del “resto del mundo” por su situación.
Manuel Hasbún
Secretario General
Federación Palestina de Chile