Herida
Señor Director: El intendente Huenchumilla señaló que “forma parte de la democracia” el ultimátum de impedir el normal funcionamiento del aeropuerto de Temuco que dieron algunas comunidades mapuches. En democracia este tipo de amenazas son inaceptables. El peligro que reviste un aeropuerto eventualmente violentado o tomado por manifestantes es enorme, sobre todo para los pasajeros, […]
Señor Director:
El intendente Huenchumilla señaló que “forma parte de la democracia” el ultimátum de impedir el normal funcionamiento del aeropuerto de Temuco que dieron algunas comunidades mapuches. En democracia este tipo de amenazas son inaceptables. El peligro que reviste un aeropuerto eventualmente violentado o tomado por manifestantes es enorme, sobre todo para los pasajeros, por lo que minimizar este tipo de advertencias es otro más de los habituales errores del intendente. Lamentablemente, en La Araucanía, gracias a la inoperancia y la indulgencia de las autoridades, el dar ultimátum y amedrentar se han transformado en una constante incomprensible.
Una Premio Nobel de la Paz dijo: “Es posible obtener resultados más rápidamente usando la violencia que con medios pacíficos, pero se producen heridas que tardan mucho tiempo en curar”. Ya tenemos una herida porque el Estado chileno mantiene una deuda con el pueblo mapuche, pero si sanamos esa misma herida permitiendo que se origine otra, entraremos en un círculo vicioso y dañino en donde no habrá doctor que logre frenar la hemorragia. Y una región tan maravillosa como la nuestra no merece terminar desangrada por culpa de unos pocos, tanto de los que amenazan y usan la violencia como de los que no han hecho nada por extirparla definitivamente.
Alejandro Martini Iriarte
Paz en La Araucanía