Segunda mirada: Escapar de la mala fortuna

Hoy es viernes 13, día de mala suerte. 13 hubo en la última cena, el capítulo 13 del Apocalipsis es el Anticristo. En el mundo hispano, este día no tiene nada de malo. Terrible sería que fuera martes: ni te cases, ni te embarques. Marte es la versión latina del dios de la guerra y un martes 13 cayó Constantinopla. Para los italianos, en cambio, el mal día es el viernes 17. Los romanos se abstenían de escribir ese número, XVII, porque era llamar a la muerte: si se reordena se podía leer “viví”, como solían decir los epitafios.

Viernes, martes, 13 o 17, de la suerte no se puede escapar. Como dijo Cicerón: “Es la fortuna, y no la sabiduría, la que gobierna la vida del hombre”.

En Chile, estos días, hemos visto cómo varias personalidades fuertes, al enterarse de la fortuna que podrían correr, han intentado renunciar a ella, algunos dejando cargos, otros desligándose de todo conocimiento de causa. Edipo lo intentó siglos atrás. Aprendamos de él, no vaya a ser que nos llenemos de ciegos.

E. Risopatrón