Demócratas abandonan a Obama
“El distanciamiento entre Obama y su partido puede socavar gravemente su capacidad de liderazgo en el resto de su mandato”.
El Presidente Barack Obama ha sido criticado por los miembros de su partido, debido a lo que perciben como una actitud distante y de cierto desprecio hacia sus correligionarios en el Congreso.
La semana pasada, y con sólo 19 meses restantes como Mandatario, los demócratas de la Cámara de Representantes le devolvieron la mano, ignorando sus peticiones y rechazando un proyecto de ley fundamental para la aprobación de la Asociación de Comercio Transpacífico (TPP, en sus siglas anglosajonas), una de sus más importantes iniciativas de relaciones internacionales.
Tras alambicados procedimientos legislativos, los demócratas votaron contra la Asistencia por Ajuste de Comercio, un programa de ayuda a trabajadores que hayan perdido su empleo por pactos comerciales que el Partido Demócrata ha respaldado por cuarenta años. La líder de la minoría en la Cámara, Nancy Pelosi, quien dirigió la agenda legislativa del Presidente por los últimos dos años, recibió solicitudes de apoyo de Obama hasta el último minuto y declaró que “queremos un mejor trato para los trabajadores americanos”.
El pacto comercial uniría doce naciones y representaría 40 por ciento del producto bruto mundial y 26 por ciento del comercio. Tuvo su origen en un acuerdo entre nuestro país, Nueva Zelandia, Singapur y Brunéi firmado el 2005, que fue expandido por Washington. Aunque China no forma parte del acuerdo, éste es visto como una parte integral de la política de Obama de un “pivote hacia Asia”, con mayor presencia militar y comercial en la región.
El TPP se suma a una iniciativa similar para el Atlántico, las negociaciones con Irán para restringir su programa nuclear y la apertura hacia Cuba, proyectos que Obama busca dejar como su legado de política exterior. El proyecto de ley aún puede ser rescatado mediante complejas maniobras parlamentarias, pero la rebeldía de una mayoría de los diputados demócratas demuestra un importante quiebre.
El Partido Demócrata está girando a la izquierda. Se reflejó en esta votación y en el anuncio de la candidatura de Hillary Clinton, quien mantuvo un significativo silencio sobre el tema a la vez que se distanció del legado de su marido, el ex Presidente Bill Clinton, quien pudo convencer al partido de aprobar el tratado de libre comercio con México y Canadá. Al margen de que el resultado aún podría ser revertido, el distanciamiento entre Obama y su partido puede socavar gravemente su capacidad de liderazgo en el resto de su mandato.