Balas de plata
Señor Director: El ministro del interior, Jorge Burgos, afirmó recientemente: “Tenemos un problema bastante jodido con el tema de la seguridad pública”. El mismo ministro y la Presidenta Bachelet, manifestaron también que: “No hay una bala de plata”, para resolver el problema. Las máximas autoridades —que están tomando algunas medidas al respecto, presionadas por el […]
Señor Director:
El ministro del interior, Jorge Burgos, afirmó recientemente: “Tenemos un problema bastante jodido con el tema de la seguridad pública”. El mismo ministro y la Presidenta Bachelet, manifestaron también que: “No hay una bala de plata”, para resolver el problema. Las máximas autoridades —que están tomando algunas medidas al respecto, presionadas por el profundo malestar de la ciudadanía— debieran tener siempre presente que la Constitución garantiza a los ciudadanos: “El derecho a la libertad personal y a la seguridad individual”, y, a la vez, obliga al Estado a: “Dar protección a la población”. Los delincuentes podrán ser feroces como lobos pero no son licántropos que sólo se contengan con balas de plata. Lobos, lobeznos y delincuencia de hombres bestia se detienen con jueces que no sean prevaricadores, y con leyes y barrotes de hierro. El Gobierno no puede claudicar en sus deberes primordiales. Nadie quiere tener que apelar a vulgares balas de plomo, para poder defenderse.
Kenneth Ledger Toledo