Segunda mirada: Kaplan y la medicina del ayer
Ayer, la noticia del primer trasplante doble de manos apareció primero en portales de internet y luego en un breve en este humilde vespertino de excelencia. Hoy, esa maravillosa efeméride de la medicina y la tecnología mereció un pequeño navegador en El Mercurio, con una nota a un cuarto de página en la sección de […]
Ayer, la noticia del primer trasplante doble de manos apareció primero en portales de internet y luego en un breve en este humilde vespertino de excelencia. Hoy, esa maravillosa efeméride de la medicina y la tecnología mereció un pequeño navegador en El Mercurio, con una nota a un cuarto de página en la sección de Vida, Ciencia y Tecnología. ¿Cuándo las maravillas médicas comenzaron a ser relleno entre las páginas de los diarios?
Hoy los jóvenes más inteligentes se pelean las becas de Medicina de universidades privadas y escogen su especialidad dependiendo de cuán lucrativa sea.
Generaciones brillantes de jóvenes maravillados con los dioses de bata blanca, que salvaban vidas y revivían la medicina luego de una historia de sangrías y lavativas, se diluyeron. Jóvenes médicos de ayer, con un ideal, que junto a ellos está por jubilar, fueron influenciados por el afán pedagógico del Dr. Kaplan, que les inculcó que la medicina era una acción social. Hoy es un lucrativo prospecto.
E. Risopatrón