Nos levantaremos
Una de las pesadillas de todo chileno —y de todo ser humano, como nos recuerda Kafka— es la burocracia. Especialmente irritante suele ser la burocracia municipal. Lidiar con formularios, triplicados, ventanillas múltiples y funcionarios en permanente hora de colación o interminables jornadas de reflexión interna hace que cualquiera pierda la esperanza en el sistema. Hay […]
Una de las pesadillas de todo chileno —y de todo ser humano, como nos recuerda Kafka— es la burocracia. Especialmente irritante suele ser la burocracia municipal. Lidiar con formularios, triplicados, ventanillas múltiples y funcionarios en permanente hora de colación o interminables jornadas de reflexión interna hace que cualquiera pierda la esperanza en el sistema.
Hay ocasiones, sin embargo, en que la burocracia municipal nos ofrece también una luz. Mi homenaje de hoy va al anónimo funcionario de Canela, epicentro del terremoto, que pasada la medianoche, en medio de la destrucción y el miedo, se dio tiempo para subir al Twitter oficial de la municipalidad una foto en penumbras de la devastación, acompañada de un mensaje tan breve como significativo: “La oscuridad es cómplice de los daños. Pero nos levantaremos. Una y mil veces. Sector central de Canela Baja”. Imagino que todo Chile estará de acuerdo.
J. J. Cruz