Segunda mirada: Brusco despertar

Por Max Power Casi nada duraron las cuentas alegres que nos dejó la Copa América como espectáculo, más allá del penalazo de Alexis. Justo cuando inflábamos el pecho por la organización y los estadios repletos con niños pintados y abuelitas enarbolando las banderas farkianas, un lote de inadaptados de Everton y Wanderers nos sacan del […]

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