Conocer los motivos que hay detrás del allegamiento, en voz de las propias familias que se ven forzadas a vivir en condiciones precarias, sin derecho a un espacio propio y con altos grados de hacinamiento, fue una de las razones detrás del estudio “Allegamiento y solicitud de viviendas de emergencia: más que una estrategia económica”, trabajo conjunto de Fundación Vivienda y el Centro de Investigación Social (CIS) de TECHO-Chile. El lanzamiento de la publicación que contiene los principales resultados de este estudio se realizó el martes 4 de noviembre en el contexto del II Congreso Social, organizado por Pastoral UC, y contó con los comentarios de expertos en la temática: Consuelo Araos, socióloga; Pablo Gramsch, jefe de la División de Política Habitacional del MINVU; y Pedro Leiva, vocero y representante del movimiento de allegados “Somos Peñalolén”.
Felipe Arteaga, director ejecutivo de Fundación Vivienda, indicó que el allegamiento responde a dinámicas complejas y, por tanto, su solución no puede estar basada en las fórmulas tradicionales que se han venido aplicando hasta ahora, sino que se debe reconocer su real complejidad y empezar a innovar en respuestas que vayan en ese sentido. En este sentido, la presentación de Alexandra Solís, socióloga e investigadora del CIS de TECHO-Chile, fue dando a conocer el contenido de este estudio de carácter cualitativo, el cual surgió de la entrevista a 17 personas que vivían en situación de allegamiento y que hubieran acudido a Fundación Vivienda a solicitar una vivienda de emergencia. De esta forma, se develó que existen 5 motivos detrás de la decisión de allegarse, tales como problemas familiares, económicos, unificación familiar, pérdida de terreno e imposibilidad de arrendar. Asimismo, de las entrevistas se pudo llegar a aspectos positivos del allegamiento, tales como el apoyo económico entre familia allegada y receptora, apoyo en el cuidado de los niños y cercanía con redes. Entre los aspectos negativos se cuentan la falta de espacio (hacinamiento), de privacidad, las adicciones que conllevan problemas en la convivencia y la ausencia de poder de decisión de la vida personal.
Todos estos motivos son los que están detrás de la solicitud de una vivienda de emergencia, según lo que develó el estudio. Muchas de las familias que buscan acceder a esta solución comprenden que se trata de algo transitorio, sin embargo manifiestan que la vivienda de emergencia es considerada una vivienda definitiva, que incluso puede servir de herencia para sus hijos. De hecho, se develó una visión bastante crítica de la política habitacional del Estado, en visión de las familias que viven allegadas.
Pedro Leiva, de “Somos Peñalolén”, dijo que los allegados son “el gran campamento de Chile” y que se encuentran invisibles, de manera que estas investigaciones aportan a que salgan de esa situación, que lleva a que las soluciones sean vistas desde los números y no desde la calidad de éstas. Según este dirigente, hay que ahondar en las razones que están detrás de la elección de estas familias por una vivienda de emergencia en lugar de una definitiva: desinformación y falta de participación, infraestructura que no corresponde a la realidad de las personas y políticas habitacionales que no responden a la urgencia.
La socióloga Consuelo Araos, por su parte, indicó que a su juicio se ha visto cierto “desinterés” de la política pública respecto a la realidad del allegamiento. En un desglose del título de la publicación de Fundación Vivienda y CIS TECHO-Chile, Consuelo Araos dijo que la “solicitud de vivienda de emergencia” por parte de las familias allegadas era una crítica de éstas hacia la cantidad y calidad de la oferta actual de viviendas definitivas, así como una manifestación positiva de lo que quieren como oferta. Respecto a “más que una estrategia económica”, Araos destacó la alta valoración que se le da a las relaciones familiares y la unidad entre generaciones, aspecto que, según ella, no es considerado en la política pública. Araos dijo que existe cierta “predisposición al allegamiento”, la cual es gatillada en muchos casos por las condiciones de pobreza y vulnerabilidad, y que en el estudio de Fundación Vivienda y CIS TECHO-Chile se refleja la tensión que existe entre la autonomía versus la proximidad a sus familias de origen.
Juan Pablo Gramsch dio varias luces sobre los cambios que vienen en la política habitacional del MINVU, de manera de responder de mejor manera a las necesidades reflejadas en esta publicación: incorporar mayor diversidad de soluciones habitacionales (pequeños condominios familiares, densificación predial y construcción en sitio propio), acoger las diversidades familiares, mejorar el equipamiento y áreas verdes, mejorar la localización de los conjuntos habitacionales y de las familias que se radican para evitar el desarraigo y mejorar el acompañamiento (plan de habilitación social).
La versión resumida de este estudio se entregó en formato libro a los asistentes y también se puede descargar en www.fundacionvivienda.cl. Del mismo modo, será publicada en digital la versión completa.