Con el compromiso de los voluntarios de entregar de su tiempo -como si fuera un cliente particular al que queremos dejar completamente satisfecho- esta Fundación contacta a los profesionales inscritos para cubrir las necesidades que surgen desde las organizaciones, la idea es que los voluntarios trabajen para proyectos puntuales y luego dejen que la organización se vuelva autónoma.

Ingenieros, abogados, trabajadores sociales, diseñadores, periodistas, sicólogos y sociólogos, son los profesionales más solicitados por las organizaciones a las que ofrecen asesorías. Éstas deben ser entidades sin fines de lucro y que trabajen por la superación de la pobreza.

Cuando nacieron, los primeros trabajos fueron para el Hogar de Cristo, Coanil y la Fundación Las Rosas, pero muy luego se dedicaron a las organizaciones pequeñas. -“Colaboramos con los equipos para que profesionalicen sus organizaciones y las hagan más grandes”. -explica Valentina Insulza, su directora.

Las organizaciones, aunque pequeñas, deben cumplir con presupuestos y contabilidad. “Conversamos los requisitos para postular a fondos y estudiamos con ellos las exigencias legales. En el área de comunicaciones nuestros voluntarios les ayudan para confeccionar folletos, afiches y tener su propia página en internet”- explica la Directora y Abogada.

Historia

Los amigos Cristián del Campo, actual capellán del Techo para Chile; Luis Felipe Merino, Juan Cristóbal Gumucio y Jaime Ruiz Tagle, compañeros del San Ignacio, siguieron amigos aunque en distintas universidades; unidos especialmente por los trabajos sociales. Sin embargo, ya recibidos se dieron cuenta que -como profesionales- no se aprovechaban sus capacidades y decidieron crear Trascender,

En estos 11 años, 570 organizaciones sociales han contado con asesorías o han desarrollado sus proyectos en conjuntos con profesionales de Trascender. La Fundación también ha abierto oficinas en Antofagasta, Puerto Montt y –a raíz del terremoto- en Concepción.

“Si bien hemos crecido para atender otras regiones, esta Fundación sigue enfocado –desde sus orígenes- a las organizaciones más pequeñas, las que cuentan con pocas redes y en las que nuestros voluntarios pueden tener el mayor impacto”, explica Valentina Insulza